Construye tu red de contactos para tu futuro profesional

Que la mayor parte de los trabajos se consiguen a través de contactos profesionales es una realidad que todo el mundo conoce, y si estás buscando oportunidades laborales, sabes que necesitas desarrollar tu habilidad para generar esos contactos,  lo que la gente conoce por hacer networking.

Cuando vuelves a conectar con antiguos  compañeros de estudios  que hacía siglos que no sabías nada de ellos gracias al bendito Facebook, te das cuenta  de que a los que mejor les ha ido, al menos en apariencia, es a aquellos que , tal vez no eran los que tenían los más brillantes expedientes académicos, pero sí los  que tenían  más facilidad para conocer a gente y no tenían ni un ápice de vergüenza por acercarse a los profesores y hacerles preguntas sobre aspectos que les pudieran interesar para su futuro profesional. Según yo observaba y admiraba en aquel tiempo, eran personas que no se frustraban con facilidad ante una negativa por parte del profesor o de otra persona para concederles un rato de su tiempo; se lo tomaban con deportividad y seguían insistiendo más adelante si les interesaba mantener esa relación.

En este punto todos estamos de acuerdo del valor de cultivar la maravillosa habilidad hacer networking, pero aunque nos cueste más o menos, todos tenemos la  posibilidad de mejorar si entendemos que de ese esfuerzo depende que alcancemos  mejores ocupaciones, o al menos,  más oportunidades para conseguir nuestros objetivos profesionales.

Saber hacer contactos es una habilidad especialmente valorada por las  empresas que se dedican la consultoría,  marketing, asesoramiento/formación, atención al cliente, banca,  venta, etc.., pues los profesionales que trabajan en estas áreas  necesitan entablar buenas relaciones para desempeñar  eficazmente sus cometidos profesionales.

La pregunta que te harás seguramente es, ¿y cómo construyo una red de contactos profesional?

En este punto voy  darte algunas pistas que te pueden ayudar:

En primer lugar, identifica para qué quieres hacer una red de contactos, por ejemplo, podría ser para iniciar o cambiar tu carrera profesional, a partir de ahí sabrás qué tipo de personas son las que te interesa incorporar a tu red.

Si eres un recién titulado tal vez te sirva empezar con los profesores que te dirigieron tu TFG, o que están en algún departamento cuya materia te gusta especialmente, o participan en empresas que  te interesan. También puede ser útil conectar con personas que han desempeñado  o desempeñan una determinada actividad profesional a la que está pensando dedicarte. Hay gente apasionada por su materia a la que no le importa darte algunos consejos, siempre que te muestres amable y tengas paciencia esperando su respuesta.

Identificadas el tipo de personas que te interesan, ver qué contactos tienes, cuántos pueden ser reales u “offline” con los que puedes mantener algún tipo de relación cara a cara (compañeros de estudios, de aficiones, amigos de tus amigos, de prácticas,  de trabajo, una persona de una empresa con la que puedes hablar) y cuántos son todavía “on line”(redes sociales, blogs, foros especializados…), aunque en un futuro  convendría que se pudieran convertir en los del otro tipo.

También  es conveniente que te plantees, qué beneficios obtiene la persona que se relaciona contigo, puesto que las relaciones se basan tanto  en el principio de la confianza, como en el  de la reciprocidad. Los beneficios que obtiene la persona que se relaciona contigo profesionalmente pueden ir desde que le prestas ayuda para resolver algún problema que tiene o le ayudas en alguna tarea que puedes hacer por ella (acumulación de tareas), por ejemplo prestando tu ayuda a un profesor de un departamento, a una empresa pequeña que empieza, tipo Start up, o bien a un colega profesional.  Porque gracias a ti puede acceder a contactos de tu propia red que le resulten interesantes, o incluso, que les ayudes a ganar más dinero.

Una vez elaborado un inventario de tus contactos, visto de qué tipo son y lo que puedes ofrecerles y/o aprender de ellos, te recomiendo elaborar algún tipo de documento que te sirva a modo de agenda de seguimiento, para comprobar con cuántas personas has entablado relación y de qué tipo, con cuántas de ellas sigues en contacto regularmente, qué oportunidades han surgido o pueden surgir de estas relaciones, respuestas positivas, negativas o no  respuestas que has recibido para ver qué puedes hacer  para mejorar tus estrategias y , por último, cuales están pendientes todavía.

La red de contactos ha de cuidarse con mucho mimo, como si de una planta se tratara, se ha de mantener al  día con llamadas para saber cómo le va al otro y ofrecerle  tu ayuda, enviarle correos u otro tipo de mensajes para  saludar y recordar que sigues ahí, invitarle a eventos o conferencias del sector, estudios o profesión, enviar noticias de interés, recomendarle en sus redes sociales y comentarle publicaciones o cualquier contenido que pueda ser relevante.

En fin, se podrían decir más cosas, y para ahondar en este tema te recomiendo un libro  que es un auténtico manual  sobre el tema “El éxito en seis cafés”, de Pino Bethencourt Gallagher, en Gestión 2000.

Ánimo, el esfuerzo vale la pena.

 

Inmaculada Badenes Luz

Orientadora  del Servicio Integrado de Empleo-UPV